- Dom Oct 22, 2006 17:40
#13399
Sueños de campeón
De la mano de un maduro LeBron James, los Cleveland Cavaliers se ilusionan con convertirse verdaderamente en contendientes al título
Por Brian Windhorst
ESPN.com
CLEVELAND - En los últimos años, los Cavaliers parecen haber vivido una película épica, con ya saben quien como protagonista principal.
Getty Images
James está listo para conducir a los Cavs al título Allá por el 2003, los Cavs lucían como quien obtiene su primera licencia de conducir y recibe las llaves de un automóvil último modelo llamado LeBron James. Claro que no sabían exactamente que hacer con él. Y lo precedieron los típicos problemas iniciales mezclados con algunas noches de jolgorio.
Tres años después, la organización siente haber madurado. Y como un recién graduado, quieren entrar rápidamente en el mundo de los contendientes.
El progreso ha sido constante. En la primera temporada de James, los Cavs ganaron 20 partidos más que el año anterior. En el segundo año, consiguieron 42 victorias para coronar su primera campaña ganadora en siete años, pero perdieron el desempate para entrar a los playoffs.
Y en la última temporada explotaron de la mano de James, que se consagró como súper estrella. El alero fue elegido para el primer equipo All-NBA, fue el JMV del Juego de Estrellas y terminó segundo en la votación al Jugador Más Valioso de la temporada. Los Cavs ganaron 50 partidos, entraron a los playoffs por primera vez en ocho años y ganaron su primera serie de postemporada en 13 años. "Creo que podemos llegar a las Finales. Creo que podemos ganar todo", dijo James. "No deberías estar en la NBA si no crees que puedes ganar todo". Primera semana de emociones
La NBA por ESPN TV
Uno puede pensar que es algo realista o que tiene que ver con un orgullo desmedido. Pero en una ciudad que no ha festejado títulos en deportes profesionales desde 1964, poder creer seriamente en un equipo es un paso importante.
Sólo una temporada atrás, los Cavs soñaban con entrar en la postemporada. Considerando que más de la mitad de los 30 equipos de la NBA lo consigue, eso no sonaba como una meta desmedida. Pero el gusto dulce del éxito en abril y mayo - y especialmente la tan ajustada derrota contra los Pistons - tiene a todos los habitantes de Cleveland alegando que "estuvieron a un rebote del triunfo en el sexto juego" y confiados en el futuro.
"El año pasado querían que entremos a los playoffs, este año quieren que ganemos un campeonato", dijo el base Eric Snow, quien es el co-capitán junto a James. "No debería sonar como demasiado, pero es una gran diferencia. Y si eso es lo que quieres, entonces esa debería ser tu meta".
El plan de los Cavs para lograrlo es simple.
La meta en temporada baja era lograr la estabilidad, algo que el gerente general Danny Ferry y el entrenador Mike Brown admiran de Miami o San Antonio.
En sus primeras tres temporadas, James tuvo tres entrenadores en jefe y constantes cambios en el plantel. La campaña pasada llegaron ocho jugadores nuevos en el campamento de prácticas; y el año previo arribaron siete desconocidos. Este verano, los Cavs extendieron el contrato de James hasta el 2010 y el de Drew Gooden hasta el 2009, asegurándose que se mantenga la misma alineación titular del año pasado. El único agente libre incorporado que tendría minutos en la rotación sería el base veterano David Wesley.
La meta es conformar un grupo cercano que se conozca bien y entienda el sistema. Los resultados por ahora han mostrado una expansión en el rol de James como líder.
Sintiéndose más cómodo y confiado que nunca tras la experiencia como co-capitán del seleccionado estadounidense durante el verano, James ha avanzado hacia una nueva marcha. En los primeros entrenamientos, James lideró a su equipo en ejercicios de velocidad contra el viento. Además es quien habla al final de las prácticas y en las reuniones pre-partidos. Todo eso encaja con su ya dominante presencia en los costados durante los juegos.
Incluso no tiene miedo de hacerle sugerencias a Brown, sobre jugadas o incluso acerca de los jugadores que debe usar en varias situaciones de partido.
"Cuando tu mejor jugador se convierte en el mejor ejemplo, el equipo mejora", dijo Snow. "Simplifica las cosas para el entrenador, porque el demanda que las cosas se hagan bien".
O al menos ese es el plan. El problema está en que las altas expectativas pueden convertirse en una carga demasiado pesada para los Cavs. Es difícil imaginar que James pueda acarrear mayor peso que el año pasado, cuando Larry Hughes se perdió 46 partidos con dos operaciones en sus dedos, y los agentes libres Donyell Marshall y Damon Jones completaron temporadas para el olvido. Incluso el consistente Zydrunas Ilgauskas defraudó a su equipo en los playoffs, dejándole a James toda la carga.
James ganó dos partidos con tiros en los últimos segundos ante los Wizards en la primera ronda, cuando promedió 35 puntos en casi 48 minutos por encuentro. Cuando la básica ofensiva de cortina y desmarque de los Cavs falló en el séptimo juego ante los Pistons, James obtuvo 27 puntos y el resto del equipo sólo 34.
Brown ha instalado algunos trucos en la ofensiva, Jones y Marshall se presentaron en mejor forma al campamento, Hughes dice estar saludable, y se están tomando precauciones para que James no deba exigirse de más. Todo ello debe funcionar para que los Cavs puedan luchar seriamente por la corona de la Conferencia Este.
"Nos lo debemos a nosotros mismos. Tenemos que ayudar a LeBron y tratar de sacar lo mejor de él, porque nuestra meta es ganar el título", dijo Brown, quien ganó un campeonato como asistente de los Spurs. "Si podemos lograr eso, entonces me gustan nuestras chances".
De la mano de un maduro LeBron James, los Cleveland Cavaliers se ilusionan con convertirse verdaderamente en contendientes al título
Por Brian Windhorst
ESPN.com
CLEVELAND - En los últimos años, los Cavaliers parecen haber vivido una película épica, con ya saben quien como protagonista principal.
Getty Images
James está listo para conducir a los Cavs al título Allá por el 2003, los Cavs lucían como quien obtiene su primera licencia de conducir y recibe las llaves de un automóvil último modelo llamado LeBron James. Claro que no sabían exactamente que hacer con él. Y lo precedieron los típicos problemas iniciales mezclados con algunas noches de jolgorio.
Tres años después, la organización siente haber madurado. Y como un recién graduado, quieren entrar rápidamente en el mundo de los contendientes.
El progreso ha sido constante. En la primera temporada de James, los Cavs ganaron 20 partidos más que el año anterior. En el segundo año, consiguieron 42 victorias para coronar su primera campaña ganadora en siete años, pero perdieron el desempate para entrar a los playoffs.
Y en la última temporada explotaron de la mano de James, que se consagró como súper estrella. El alero fue elegido para el primer equipo All-NBA, fue el JMV del Juego de Estrellas y terminó segundo en la votación al Jugador Más Valioso de la temporada. Los Cavs ganaron 50 partidos, entraron a los playoffs por primera vez en ocho años y ganaron su primera serie de postemporada en 13 años. "Creo que podemos llegar a las Finales. Creo que podemos ganar todo", dijo James. "No deberías estar en la NBA si no crees que puedes ganar todo". Primera semana de emociones
La NBA por ESPN TV
Uno puede pensar que es algo realista o que tiene que ver con un orgullo desmedido. Pero en una ciudad que no ha festejado títulos en deportes profesionales desde 1964, poder creer seriamente en un equipo es un paso importante.
Sólo una temporada atrás, los Cavs soñaban con entrar en la postemporada. Considerando que más de la mitad de los 30 equipos de la NBA lo consigue, eso no sonaba como una meta desmedida. Pero el gusto dulce del éxito en abril y mayo - y especialmente la tan ajustada derrota contra los Pistons - tiene a todos los habitantes de Cleveland alegando que "estuvieron a un rebote del triunfo en el sexto juego" y confiados en el futuro.
"El año pasado querían que entremos a los playoffs, este año quieren que ganemos un campeonato", dijo el base Eric Snow, quien es el co-capitán junto a James. "No debería sonar como demasiado, pero es una gran diferencia. Y si eso es lo que quieres, entonces esa debería ser tu meta".
El plan de los Cavs para lograrlo es simple.
La meta en temporada baja era lograr la estabilidad, algo que el gerente general Danny Ferry y el entrenador Mike Brown admiran de Miami o San Antonio.
En sus primeras tres temporadas, James tuvo tres entrenadores en jefe y constantes cambios en el plantel. La campaña pasada llegaron ocho jugadores nuevos en el campamento de prácticas; y el año previo arribaron siete desconocidos. Este verano, los Cavs extendieron el contrato de James hasta el 2010 y el de Drew Gooden hasta el 2009, asegurándose que se mantenga la misma alineación titular del año pasado. El único agente libre incorporado que tendría minutos en la rotación sería el base veterano David Wesley.
La meta es conformar un grupo cercano que se conozca bien y entienda el sistema. Los resultados por ahora han mostrado una expansión en el rol de James como líder.
Sintiéndose más cómodo y confiado que nunca tras la experiencia como co-capitán del seleccionado estadounidense durante el verano, James ha avanzado hacia una nueva marcha. En los primeros entrenamientos, James lideró a su equipo en ejercicios de velocidad contra el viento. Además es quien habla al final de las prácticas y en las reuniones pre-partidos. Todo eso encaja con su ya dominante presencia en los costados durante los juegos.
Incluso no tiene miedo de hacerle sugerencias a Brown, sobre jugadas o incluso acerca de los jugadores que debe usar en varias situaciones de partido.
"Cuando tu mejor jugador se convierte en el mejor ejemplo, el equipo mejora", dijo Snow. "Simplifica las cosas para el entrenador, porque el demanda que las cosas se hagan bien".
O al menos ese es el plan. El problema está en que las altas expectativas pueden convertirse en una carga demasiado pesada para los Cavs. Es difícil imaginar que James pueda acarrear mayor peso que el año pasado, cuando Larry Hughes se perdió 46 partidos con dos operaciones en sus dedos, y los agentes libres Donyell Marshall y Damon Jones completaron temporadas para el olvido. Incluso el consistente Zydrunas Ilgauskas defraudó a su equipo en los playoffs, dejándole a James toda la carga.
James ganó dos partidos con tiros en los últimos segundos ante los Wizards en la primera ronda, cuando promedió 35 puntos en casi 48 minutos por encuentro. Cuando la básica ofensiva de cortina y desmarque de los Cavs falló en el séptimo juego ante los Pistons, James obtuvo 27 puntos y el resto del equipo sólo 34.
Brown ha instalado algunos trucos en la ofensiva, Jones y Marshall se presentaron en mejor forma al campamento, Hughes dice estar saludable, y se están tomando precauciones para que James no deba exigirse de más. Todo ello debe funcionar para que los Cavs puedan luchar seriamente por la corona de la Conferencia Este.
"Nos lo debemos a nosotros mismos. Tenemos que ayudar a LeBron y tratar de sacar lo mejor de él, porque nuestra meta es ganar el título", dijo Brown, quien ganó un campeonato como asistente de los Spurs. "Si podemos lograr eso, entonces me gustan nuestras chances".